La edición de video se ha convertido en los últimos años en uno de los trabajos más demandados. Al fin y al cabo, se trata de una labor que responde a una realidad tan decisiva como determinante: el hecho de que hoy en día el formato de video es el más popular no solamente en cuanto a contenido periodístico o artístico sino también de redes sociales.
Por supuesto, semejante paradigma empieza a crearse espontáneamente a través del auge de las redes sociales y la forma en que dichas plataformas priorizaban el contenido audiovisual. Ya con el paso del tiempo, el mundo empezó a presenciar un nuevo tipo de usuario que prefería informarse y entretenerse a través del video.