La plataforma Live! de Microsoft ha sido uno de los muchos intentos de la compañía de Redmond de agarrarse al carro de la Web 2.0. Aunque en el mercado del escritorio, todos debemos reconocer su éxito (a pesar de las prácticas monopolísticas), el mercado de la web no se le ha dado mal, se le ha dado peor.
Las grandes startup del sector han conseguido superar al gigante en muy poco tiempo. Lo único que medio se salva, en número de usuarios, es el decadente servicio de Hotmail y su mensajería instantánea.